Los 39 escalones

Temas:

·       El héroe hitchcokeano

·       Relación del héroe con los personajes femeninos

·       Relación del héroe con el villano.

Los 39 escalones

Los 39 escalones (1935) es la segunda película  de Hitchcok que se analizará en este blog,  a diferencia de El hombre que sabía demasiado (1934) esta película se presenta mucho más depurada, tanto en la parte visual como en la definición de los personajes Hitchcokeanos.

La película de 1934 tenía un tono mucho más monótono de principio a fin, en cambio Los 39 escalones  tiene mayores matices, principalmente con la utilización de elementos cómicos a lo largo de la trama y con la incorporación de escenas de acción más innovadoras y emocionantes, por ejemplo, en la famosa escena del tren donde Richard Hannay debe saltar y ocultarse en el puente Forth Bridge.

El héroe: Richard Hannay

Con este personaje Alfred Hitchcok perfecciona y profundiza uno de los temas recurrentes en su filmografía, el falso culpable. Pues Richard Hannay es culpado por la muerte de Annabella Smith, cuando en realidad los espectadores conocemos de su inocencia, y en dicho acontecimiento se da el punto de giro que da pie al desarrollo de todas las acciones de la película.

El héroe representado por Hannay muestra diferencias con la forma en que se constituyó el personaje de Bob Lawrence, de quien se mostró facetas de su vida como un padre de familia, podría decirse un hombre normal y bueno, en cambio nosotros nunca llegamos a saber ¿Quién es Richard Hannay? ¿Cuáles son sus antecedentes? ¿Tiene o no familia? ¿Es una buena persona o no? ¿Cuáles son los motivos de su viaje a Londres? Sólo se nos brinda un único dato es un turista canadiense, sabemos que se divertía en el Music Hall lanzando complicadas preguntas al Señor Memoria, entonces ¿Por qué motivo se ve involucrado con la red de espionaje denominada los 39 escalones?

La respuesta a estas interrogantes no podrían tener una explicación más allá del nivel de las hipótesis, pero si bien uno podría pensar en un destino fatal, en el azar, parece que en Hitchcok lo que mueve al mundo es una especie de fuerza oscura, casi diabólica que lo ha arrastrado hacia una situación que es injusta para él, y que lo convierte simultáneamente en detective y fugitivo.

Esta dualidad en que se configura el papel de Richard Hannay es la que ayuda a que la película mantenga la tensión dramática, la que crea suspenso y emoción, pues ya no es el personaje luchando contra el mal, sino que también escapando del siempre incompetente sistema policial, pues este para colmo de su desgracia parece ser un aliado y amigo de los criminales.

Por otra parte, vemos como Hanney repite algunas características y recursos usados por Bob Lawrence, como por ejemplo, el uso del disfraz en la cómica escena del cambio de ropa con el lechero; escena que además deja entrever una burla a la doble moral presente en la sociedad de la época.

Otras de las características que terminan de configurar a Hannay como un héroe Hitchcokeano son: el individualismo, el empecinamiento, el desenfado y la ironía, pues las mismas circunstancias dadas en la película lo llevan a tener que resolver la situación por su propia cuenta.

No obstante,  Richard Hanney presenta algunas características particulares que lo diferencian de Bob Lawrence, por ejemplo, cumple el rol de galán seductor, esto se puede percibir en la forma en que se involucra con las mujeres de la película, tema que se desarrollara más adelante en este análisis.

Además,  Hannay es todo un referente del héroe de las películas de acción de la actualidad, pues los asuntos no se resuelven exclusivamente con la agilidad mental y el poder de deducción, sino que se involucra también la fuerza y agilidad física para salir bien librado del peligro.

Otro rasgo particular de Richard Hannay es su elocuencia en el afamado discurso que brinda por equivocación, pues deja ver la capacidad persuasiva del personaje para manipular a esa gran masa de gente, discurso que a su vez tiene un contenido que a mi punto de vista debió conmover y hacer reflexionar a las personas de su época.

Relación del héroe con los personajes femeninos

En general, la forma en que se relaciona Richard Hannay con las mujeres de la película es a través de la seducción, aunque con mayor o menor éxito.

Podría afirmarse que él se sabe a sí mismo un tipo atractivo, por consiguiente, utiliza ese recurso del que dispone para lograr sus fines.

Annabella Smith

Ella es la primera mujer con la que se relaciona Hannay, lo que podría ser un affaire con una mujer bonita y aparentemente asustada por la confusa situación acaecida en el Music Hall, se convierte en un problema que le da un giro a su existencia.

Pues una vez que lleva a Anabella a su departamento descubre que ella se oculta verdaderamente de un peligro que la asecha, entonces ella le revela su verdadera situación es una agente secreta que quiere impedir que un peligroso documento salga del país.

Parece que él no visualiza el alcance de los hechos, hasta que Anabella cae asesinada con el cuchillo de cocina de Hannay clavado en su espalda, además con un mapa que indica que debe ir a Escocia.

Es hasta ese momento que Hannay se ve obligado a sacar toda su astucia y a tomar el relevo de Annabella, pues probablemente lo que la mató a ella ahora también podría acabar con él.

La presencia de Anabella se repite más adelante en la película con el recurso de flash back, cuando vemos su rostro advirtiendo sobre el peligro del hombre a quien le falta la falange del dedo meñique y ante quien el héroe se enfrenta cara a cara.

 Existen algunas preguntas que quedan sin respuesta en el filme en relación con estos dos personajes, por ejemplo ¿Por qué Annabella recurre a Richard Hannay? ¿Por qué los que acaban con ella no lo mataron a él de una vez? Tal vez sólo podríamos especular algo entorno a esta última pregunta, y es que al dejar a Anabella muerta y a él con vida, los ojos se tornarían hacia él como el principal sospechoso, y un drama pasional  sería una explicación muy coherente para la policía que además nunca creería la historia de los 39 escalones, por tanto es perfecto para ellos pues  Hannay se convierte en un chivo expiatorio para la organización criminal, aunque ellos no contaban con que él fuera tan astuto para librarse de la comprometedora situación.

Pamela

Ella es la segunda mujer con la que el héroe se encuentra, durante su huida obligatoria y con sus persecutores pisando sus talones dentro del tren, Hannay debe buscar las formas más ingeniosas para persuadirse de la situación; es en ese momento es cuando se encuentra con Pamela, a quién besa apasionadamente en un acto de desesperación y en busca de que ella lo encubra, no obstante, sus poderes de seducción no funcionan con ella que en cambio ofendida y molesta lo delata. Dicho acontecimiento genera una de las escenas más emocionantes de la película, la riesgosa persecución en el tren.

Pamela cumple el papel de oponente de Hannay, y para desgracia de él vuelve a encontrarse con ella más adelante en la película, justo cuando había dado un conmovedor discurso, ella aparece con el verdadero político y nuevamente lo delata.

Es en ese momento cuando ella se ve a su pesar envuelta en el conflicto con los 39 escalones, porque Hannay le cuenta lo que sucede, involucrándola y convirtiéndola en alguien peligrosa para los criminales, pues tiene demasiada información.

Con Pamela se puede ver algunas ideas cargadas de ironía, porque ella es la típica persona que cree estar cumpliendo con sus deberes ciudadanos, con las normas, pero su actitud se vuelve en su contra.

También es un personaje con el cual se muestra un cierto erotismo en medio de la complicada situación, por ejemplo en la escena en que ella se quita las medias y Hannay al estar esposado a ella roza sus piernas.

La relación entre Pamela y Hannay le da un matiz cómico a los acontecimientos, como por ejemplo, la decisión de la encargada del hotel de encubrir a la pareja de amantes, o la ironía con la cual Hannay trata a Pamela diciéndole que él es un asesino de mujeres sumamente peligroso, además el hecho en sí de estar unido a alguien que es un estorbo o un inconveniente por si mismo genera emoción y comicidad en la película.

Por último, este personaje femenino pasa por una etapa de revelación en la cual descubre por sí misma, que él decía la verdad, y es en ese instante cuando decide quedarse junto al héroe,  ya se había liberado de las esposas que le ataban pero sigue con él por su voluntad. Podría pensarse que para un personaje como Pamela que se mostró al inicio como alguien que seguía las normas, encontrarse con un hombre como Hannay le produce una ruptura a sus esquemas, a su visión de mundo y la misma personalidad peligrosa, valiente y llena de misterio que él proyecta genera que cobre mayor atractivo ante sus ojos, y aunque no se dice de forma directa se puede vislumbrar que el vínculo que se generó entre ambos podría continuar después.

Margaret

Este personaje femenino representa una contraposición a la personalidad proyectada por Annabella y Pamela, quienes se presentan como mujeres de un carácter mucho más fuerte.

En cambio Margaret  se ve como una mujer timorata, que lleva su vida bajo el rol social tradicional y preestablecido de esposa y ama de casa. Además, a su circunstancias se le añade el hecho de que su esposo es un hombre mayor con el cual ella se haya unida no en términos muy románticos ni felices, pues se ve a leguas que son distintos y que no comparten su visión de mundo, pues ella añora y sueña  con las luces de la ciudad, con las mujeres de uñas pintadas y trajes bonitos, mientras que su esposo se haya conforme con la vida de campo y la tiene recluida en medio de la nada.

Tampoco comparten su moral, ella hace todo por ayudar a Hannay, mientras su esposo lo único que lo mueve es su ambición y el intentar sacar provecho de la situación, por lo cual no duda en delatar a Hannay. A la luz de estas características uno como espectador no puede sentir más que una cierta compasión hacia Margaret pues representa a un sin número de mujeres que todavía para esa época se encontraban atadas a matrimonios infelices en los que sus esposos no eran personas a quienes ellas pudieran amar, sino personas a las cuales obedecer y temer.

Margaret es un personaje triste y melancólico, no obstante, la llegada de Richard Hannay es el medio que le permite a ella romper con ese futuro impuesto, con ese destino que su vida tendrá y que ella no tiene capacidad ni voluntad para hacerlo cambiar. Él es una bocanada de aire fresco, que le da un poco de emoción en medio de la monotonía cotidiana, por esto es que ella se constituye en ayudante del héroe, quien genera también un cambio  a la personalidad que ella mostró al inicio porque ella decide que es capaz de hacer algo  y se convierte en cómplice de Hannay al ocultar el periódico, además se convierte en su salvadora al darle la chaqueta con el libro de Salmos que recibe la bala propinada a Hannay por el diabólico profesor Jordan.

Entre ambos también se da un beso, pero este es de agradecimiento e ilumina la existencia de Margaret aunque sea por ese breve lapso.

Relación del héroe con el villano

Profesor Jordan

El villano de esta película se encuentra posicionado de forma muy respetable a nivel social, es un profesor, un esposo y padre de familia, que además tiene amistad con los altos jerarcas de la policía, es decir, jamás despertaría sospechas de que es autor de actos criminales.

Es por este motivo que Hannay se ve obligado a enfrentársele sólo, y en ese panorama la figura del profesor Jordan se revela un tanto demoniaca pues posee demasiado poder.

Es curioso como la misma familia se vuelve cómplice del criminal, guardando las apariencias, pues su esposa probablemente se percata del disparo y conoce en realidad quien es su esposo.

Una característica particular del profesor Jordan es la ausencia de la falange de su dedo meñique porque es un detalle en la película, en el sentido de que Annabella había advertido a Hannay sobre dicho rasgo, y sobre la peligrosidad de ese hombre. También uno como observador de la película podría generar hipótesis en torno a la ausencia de ese dedo en ese personaje y sobre las circunstancias en que pudo haberlo perdido, lo cierto es que aunque eso no está tan claro si produce un cierto temor.

Hannay aparece en relación con el profesor Jordan como un verdadero obstáculo, pues ellos contaban con que al matar a Anabella e inculpar a Richard en esa muerte se librarían fácilmente de él, pero resulto ser más listo y hábil de lo que esperaban, y también podría interpretarse que si bien existe una fuerza oscura que mueve el mundo Hitchcokeano, también existe una fuerza que está del lado de los buenos, un simbolismo clave en la película es que sea justo con el libro de salmos religiosos, que representarían a Dios, a la justicia y al bien, que Hannay se salva del disparo.

Finalmente, el filme presenta una estructura circular donde se regresa al punto de partida de los acontecimientos el Music Hall y al show del señor Memoria, quien estaba vinculado con los 39 escalones porque en su memoria prodigiosa es donde se guarda la peligrosa  formula que el profesor Jordan y sus secuaces pretendían sacar del país.

Existe una cierta crueldad con el señor Memoria, porque su habilidad se veía menoscabada por las tontas preguntas y las burlas del público, mientras que la formula era algo grande para él, no obstante, su conocimiento lo lleva a  la muerte; esto sería una especie de metáfora de la humanidad de esa época, porque el conocimiento que prometía adelantos en beneficio de las personas fue utilizado para destruir, para atacarse los unos a los otros, de ahí la importancia de que Hannay complete la misión de Annabella porque se ha comprobado que el conocimiento en las manos equivocadas puede ser un peligro y  traer consecuencias desastrosas.